La mayoría de ocupaciones profesionales engloban ciertos riesgos. Algunas más, otras menos. Otras muchos y potencialmente graves. La pintura y la carpintería, a pesar de ser dos de los oficios más antiguos y todavía demandados en España, pertenecen a la categoría de profesiones peligrosas, por lo que el desarrollo de estas actividades requiere tomar una serie de medidas preventivas con el fin de evitar accidentes, lesiones e incluso mayores consecuencias.
No es extraño, por tanto, que la prevención de riesgos sea uno de los primeros temas más abordados al realizar un curso de pintura o un curso de carpintería. Seguir las instrucciones y usar las herramientas o equipos adecuados, puede reducir los peligros y evitar lesiones potenciales.
En otras palabras: tomar las precauciones necesarias asegurará que el trabajo se lleve a cabo de la mejor manera posible, con menos errores y una limpieza mínima.
Vamos desde Previlabor a precisar todo lo que debéis aprender sobre prevención de riesgos en un curso de pintura y un curso de carpintería, incluyendo los problemas comunes de salud y seguridad inherentes a estas profesiones.
Curso de pintura: Funciones, problemas y prevención de riesgos
Un pintor se encarga de aplicar pintura y otros acabados decorativos a superficies interiores y exteriores de edificios y otras estructuras. Los peligros intrínsecos en esta profesión, por tanto, comprenden toda situación o condición que pueda suponer un riesgo potencial para cualquier persona que realice esta actividad.
En un curso de pintura siempre se debe profundizar sobre los riesgos y las medidas de control de seguridad asociadas a este oficio. Antes, sin embargo, es necesario precisar las funciones principales de un pintor, como
- Preparar las superficies a pintar (incluyendo raspado, desempapelado, etc.).
- Determinar qué materiales se necesitarán.
- Usar, limpiar y mantener diversos equipos.
- Supervisar a los aprendices u otros trabajadores.
- Proporcionar presupuestos y facturas a los clientes.
Problemas de salud y de seguridad
Los pintores pueden trabajar en un amplio abanico de contextos, ya sea en sitios de construcción, negocios u hogares, por ejemplo. En todos ellos, se enfrenta a los siguientes peligros:
- Trabajo en alturas.
- Escaleras, plataformas y andamios.
- Trabajo en espacios confinados.
- Riesgo de lesiones oculares.
- Resbalones, tropiezos y caídas.
- Posibilidad de lesiones por caída de objetos.
- Exposición a mohos, hongos y bacterias.
- Exposición a excrementos de aves y roedores.
- Manipulación de productos de pintura, solventes, plomo y otras sustancias tóxicas.
- Proximidad a materiales inflamables o combustibles.
- Adopción de posiciones incómodas o realizar tareas físicas repetitivas.
- Estar de pie por largos periodos de tiempo.
- Levantar objetos pesados o incómodos.
- Exposición al calor y a la radiación ultravioleta.
- Ruido y estrés.
- Peligros eléctricos por trabajar cerca de líneas o equipos eléctricos con corriente.
- Trabajo a turnos o jornadas extendidas.
Medidas preventivas
En todo curso de pintura se tiene que ahondar, además, acerca de las medidas de precaución para evitar problemas de salud y seguridad. Entre ellos:
- Verificar la etiqueta de datos de seguridad del producto de pintura o revestimiento, para la selección y el uso del equipo de protección personal adecuado y el uso seguro de la pintura.
- Evaluar el área de trabajo en busca de peligros existentes y potenciales.
- Conocer las medidas de control de los peligros identificados y riesgos asociados.
- Aprender los procedimientos correctos para trabajar en alturas.
- Seleccionar la escalera correcta para el trabajo. Utilizar una brocha de mango largo siempre que sea posible, evitando el uso de escaleras.
- Evitar posiciones corporales incómodas y tomar descansos cuando sea necesario.
- Aprender técnicas seguras de levantamiento.
- Saber cómo prevenir lesiones por riesgos eléctricos. Mantener distancias seguras de equipos eléctricos energizados o líneas de servicios públicos.
- Mantener las herramientas y el equipo de seguridad en buen estado de funcionamiento.
- Usar equipo de protección personal y calzado apropiado.
- Mantener las áreas de trabajo libres de desorden y equipo.
- Aprender los procedimientos de seguridad para trabajar en espacios confinados.
- Mantener una buena ventilación durante la aplicación de la pintura.
- Prevenir la exposición a excrementos de pájaros y roedores.
Curso de carpintería: Funciones, problemas y prevención de riesgos
Un carpintero construye o repara estructuras, trabajando principalmente con madera. Esta profesión, sin embargo, como cualquier otra que implique la manipulación de materiales a través del uso de herramientas y demás equipo, conlleva riesgos reales de accidentes y lesiones.
La mayoría de los carpinteros aprenden a prevenir accidentes a través de la experiencia. Ahora, ante el notorio problema de la falta de profesionales duchos en la materia, aprender el oficio realizando un curso de carpintería, representa la mejor forma de conocer los riesgos laborales a los que nos exponemos al ejercer esta carrera.
Algunas de las funciones principales de un carpintero son:
- Mover, medir, cortar, dar forma, ensamblar y unir materiales.
- Leer, preparar e interpretar planos y dibujos.
- Preparar estimaciones de costos y documentación para los clientes.
- Cumplir con los códigos de construcción y otras regulaciones.
- Usar, limpiar y mantener diversos equipos y herramientas.
- Supervisar a los aprendices u otros trabajadores.
Problemas de salud y de seguridad
Los carpinteros enfrentan sus propios riesgos laborales, de manera que algunos de los problemas de salud y seguridad que precisamos en nuestro curso de carpintería son:
- Uso de maquinaria y herramientas de diferentes tipos.
- Exposición a ruidos fuertes de maquinaria y herramientas.
- Contacto con mohos, hongos y bacterias.
- Manipulación de productos químicos, disolventes, pinturas, tintes y otros materiales que pueden provocar dermatitis, reacciones alérgicas o problemas respiratorios.
- Riesgos de cáncer por ciertos polvos procedentes de la madera.
- Utilización de materiales inflamables.
- Riesgo de dolores o lesiones por trabajar en posiciones incómodas, realizar tareas repetitivas o levantar objetos.
- Posibilidad de sufrir cortes, abrasiones y otras lesiones por manipular piezas de trabajo y usar herramientas o equipos.
- Riesgo de enredo de partes del cuerpo en piezas giratorias o maquinaria.
- Exposición a temperaturas extremas cuando se trabaja al aire libre.
- Probabilidad de sufrir lesiones oculares por partículas voladoras.
- Trabajo en alturas.
- Estrés.
- Trabajo a turnos o jornadas extendidas.
Como bien decimos en curso de carpintería que impartimos en Previlabor, siempre pueden existir nuevos peligros adicionales que añadir a los mencionados. Generalmente producto de la naturaleza del lugar de trabajo. Por este motivo, la evaluación previa del entorno en el que se labora es de muchísima importancia para evitar accidentes.
Medidas preventivas
Un taller de carpintería tiene todo el equipo que usa un carpintero, incluidas sierras (eléctricas y manuales), máquinas para cortar madera, taladros, martillos, cuchillos, destornilladores, tornillos/clavos; productos químicos (pinturas, barnices, disolventes, etc.), así como residuos como virutas de madera y polvo.
Como veréis, los peligros y riesgos laborales son una realidad muy presente en esta profesión, de manera que algunas de las medidas preventivas que destacamos en nuestro curso de carpintería son los siguientes:
- Inspeccionar el área de trabajo, las herramientas y el equipo antes de comenzar el trabajo en busca de posibles peligros.
- Seleccionar herramientas y equipos que permitan realizar el trabajo utilizando buenos procedimientos ergonómicos.
- Optar por herramientas de bajo peso, siempre que sea posible.
- Mantener las herramientas y equipos en buen estado de funcionamiento.
- Saber cuándo reemplazar los accesorios en las máquinas para trabajar la madera.
- Limpiar el polvo de madera regularmente y mantener buenas prácticas de higiene.
- Mantener las áreas de trabajo libres de desorden.
- Desconectar la alimentación de cualquier máquina cuando tengáis que solucionar un problema o cambiar piezas.
- Usar procedimientos de bloqueo o mantener el control de la energía mientras trabajáis con alguna máquina, para evitar un arranque accidental.
- Nunca operar con maquinaria sin todas las protecciones pertinentes.
- Utilizar protección para los ojos y los oídos, así como también colocarse calzado de seguridad.
- Conocer los productos con los que estáis trabajando, incluyendo el tipo de madera, producto químico, pintura, tinte, etc.
- Emplear técnicas seguras de levantamiento.
- Evitar posturas incómodas o tareas repetitivas.
- Tomar descansos frecuentes y pararse en la posición correcta.
- Nunca usar vuestras manos para limpiar la madera o el aserrín. Utilizad un palo de empuje y un cepillo.
- No llevar ropa holgada cerca de piezas giratorias o maquinaria.
- Seguir un patrón de trabajo por turnos recomendados y conocer los peligros asociados.
- Instalar y mantener una ventilación adecuada.
Conclusiones
A simple vista no parecen actividades laborales a destacar dentro de una clasificación de aquellas potencialmente peligrosas, pero sí que la pintura y la carpintería deben ser enfocadas por sus profesionales con cautela y mucha precaución. Son oficios que siguen ejercidos por un número considerable de trabajadores (más pintores que carpinteros) y que, por tanto, se debe informar y educar sobre la prevención de riesgos en sus entornos laborales.
Al ser carreras no exentas de peligros que pueden comprometer la salud de sus protagonistas, es vital tener conocimiento sobre las medidas de precaución que se deben aplicar durante el desarrollo de dichas actividades, para así reducir las posibilidades de lesiones, laceraciones, cortaduras, caídas, etc.
Cuando alguien se dedica a estas ocupaciones, es muy difícil encontrar un manual sobre los cuidados que se deben tener en cuenta mientras se trabaja. Al menos que os forméis en un entorno educativo, como el curso de pintura y el curso de carpintería que ponemos a vuestro alcance en Previlabor.